Soul: Existencialismo para niños o caricatura para gente adulta

Soul, Disney Pixar

En esta nueva sección de Digital Dominium estaremos explorando algunas de las producciones de la fabulosa fábrica de sueños y de sus producciones más recientes. (Cine y Tv) Iniciaremos esta serie de artículos con la no menos polémica “Soul” la última producción De Disney-Pixar que ha dado mucho de qué hablar, más que las anteriores.

Si no fuera escritor sino sastre, las tijeras no alcanzaran para toda la tela que debo cortar sobre este tema. Como escritor, no alcanzarían los espacios para todo lo que hay que escribir de ella. Sin embargo, no se trata de hacer spoiler ni de contarles la película, o mucho menos ponernos filosóficos. Así que vamos directo al grano.

Soul es la historia de un músico de Jazz llamado Joe, quien a sus cuarenta aun no consigue sentirse realizado. Dicta clases para sobrevivir en una secundaria y de vez en cuando hace un toque en algún café o bar, hasta que un día uno de sus viejos alumnos le busca para tocar con una reconocida interprete, lo que se traduce de inmediato en la oportunidad que tanto esperaba. El acepta y justo ese día cae por accidente y en teoría muere. Una vez en el más allá hace lo imposible por volver.

Esa es la sinopsis, parece sencillo ¿Verdad? Entonces ¿Cuál es el alboroto? ¿Por qué dicen que es para adultos? Toca muchos temas, que son realmente bien existenciales, si los ponemos frente a un niño promedio, lo que no quiere decir que ellos no puedan entenderlo, al menos no como los adultos. Porque la peli es realmente divertida, tiene un humor físico y otro intelectual: negro y mordaz diría yo, sin irse a los extremos.

Aunque Pixar ya venía progresivamente introduciendo este tipo de temas con Up y luego con Coco, en esta cinta empujan el umbral del tema un poco más allá, tocando en su argumento la realización personal, el lugar que ocupamos en la vida, nuestro propósito en la existencia, y las satisfacciones personales en función de los logros. Suena como a un poco a libro de Milan Kundera, pero no se inquieten. El ritmo, el humor, las excelentes animaciones (Maravillosas, superando sus películas anteriores) y las situaciones y el tratamiento de los diálogos, hacen ver cada uno de estos temas, que aunque profundos y haciéndonos pensar, no se hace pesados ni difíciles de digerir.

Entonces la gran pregunta es ¿Vale la pena verla? Pues claro que sí, por lo dicho anteriormente más las animaciones insuperables y las excelentes voces interpretadas por Jemie Foxx, Tina Fey y Angela Bassett, entre otros. ¿Podríamos verlas con niños? Porque no. Sería interesante tener luego de la peli una buena conversación con ellos, aunque sentí en esta cinta un ritmo más adulto y menos clímax que en Toy History, Up y Coco. Pero seguro los más chicos se quedarán hasta el final.

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¿Qué hará Pixar después de esta cinta? Me preguntaré después…

By: Denis M. Greg